La Cordillera Submarina del Coco, denotada en color pardo-rosáceo en la imagen, es una cordillera compuesta por rocas volcánicas geológicamente jóvenes y se originó en lo que se conoce hoy como las Islas Galápagos, frente a la costa Pacífica ecuatoriana (Centro de Dispersión de Galápagos). Al haber allí una apertura en el fondo oceánico, el material salía y se solidificaba formando las lavas (magma solidificado) que hoy conforman dicha cordillera. El material emergente no solo ascendía verticalmente (como haciendo crecer la montaña) sino que era desplazado hacia el Noreste por el empuje de nuevos y grandes volúmenes de material que seguía saliendo además del arrastre generado por el movimiento de la placa tectónica.
A ritmo de empujes y avances, la cordillera fue creciendo y avanzando hacia el territorio Centroamericano hasta llegar un día a la zona donde la Placa del Coco se introduce bajo la Placa Caribe, frente a la Península de Osa. Desde entonces, esta cordillera ha estado en colisión con la Placa Caribe, tratando de introducirse bajo ella pero, dado que está compuesta por rocas jóvenes, tiende a flotar en vez de hundirse, dificultando el proceso; por esta razón, la subducción (penetración) de la placa del Coco bajo la placa Caribe es poco profunda en el Sur de Costa Rica. La cordillera es parte de la Placa del Coco y su cumbre, única fuera del agua, es la Isla del Coco. El nombre Placa del Coco muy probablemente provenga del nombre de la Isla.
Fuente de la imagen: http://www.geomapapp.org/.