Localización
La falla Jesús María se ubica al noreste del Golfo de Nicoya (Barquero & Alvarado, 2011). Su extensión abarca no solo parte de la plataforma continental en la parte este del Golfo de Nicoya, sino que a su vez se prolonga a lo largo de la costa, en la zona entre Esparza y Orotina.
Longitud
La longitud aproximada de la falla es de 23km, incluyendo la parte marina y continental (Denyer et al., 2003).
La falla Jesús María está compuesta por dos trazas que se orientan, una con rumbo N45°E y la segunda es una traza geológicamente antigua con rumbo N60°E (Denyer et al., 2003). Es considerada una falla con movimiento sinestral-normal por Fisher et al. (1998) y corroborada por Montero (1999) como una falla normal de alto ángulo. Fisher et al. (1998) sugieren que esta falla posee una inclinación promedio orientada hacia el sureste.
Expresión Geomorfológica
Dentro de la parte terrestre, esta falla se refleja geomorfológicamente en un escarpe al sureste de la misma y en la parte noreste se expresa con un movimiento de cizalle, que se extiende a lo largo de la zona noroeste del río Jesús María (Fisher et al., 1994). Su traza también se prolonga en el mar a poca distancia de la costa, según estudios realizados sobre la geofísica marina mencionados en Montero et al. (1998). Otras expresiones geomorfológicas que hacen alusión a esta falla son nombradas por Montero (1999), como el levantamiento relativo del bloque Esparza, que se ubica entre la falla Barranca y la falla Jesús María (Montero, 1999).
Historia
Evidencias apuntan que esta falla tuvo actividad relativamente reciente, por ejemplo, se han encontrado lahares con edades cercanas al Terciario Tardío y el Cuaternario efectados por esta falla. También, se atribuye a la falla el hundimiento del bloque oriental, por donde discurre el río Jesús María y la aparición de varios esteros en la zona por donde corre dicha traza (Montero, 1999). La falla Jesús María se ha vinculado según Barquero & Alvarado (2011) con un conjunto de fallas que se conocen como: Sistema de Fallas Tárcoles-Jesús María-Barranca-Garita, que se extienden de manera paralela en la región noroeste del Valle Central y que durante la última década han mostrado sismicidad reportada por la Red Sismológica Nacional. Este sistema tiene relación con el sismo de Orotina del 4 de Marzo de 1994 (M 7,0) según Montero (1999) y Barquero & Alvarado (2011).
Potencial
Según Fisher et al. (1994), Montero et al. (1998) y Montero (1999), esta falla puede ser clasificada como activa, la tasa de movimiento de la falla es probablemente de < 1 mm/yr como mencionan Montero et al. (1998). El potencial de la falla Jesús María es desconocido, sin embargo, considerando su longitud aproximada de 23 km y aplicando las relaciones de Bonilla et al., (1984) y Ambrasey (1988), podría tener capacidad de generar terremotos con magnitudes Mw entre 6,5 a 7,0.
Referencias
AMBRASEYS, N.N., 1988: Magnitudes-fault length relation ships for earthquakes in the Middle East. -En: W.K.H. Lee, H. Meyers & K. Shimazaki. (ed.): Historial Seismograms and Earthquakes of the world. Academic Press, San Diego, pp. 309-310.
BARQUERO, R. & ALVARADO, G., 2011: Fallas activas en Costa Rica.-39 págs. Informe Interno RSN.
BONILLA, M.G., Mark, R.K & Lienkamper, J.J., 1984: Statistical relations among earthquake magnitude, surface length, and surface fault displacement. -Bull. Seismol. Soc. Amer., 74 (6): 2379-2411.
DENYER, P., MONTERO, W. & ALVARADO, G.E., 2003: Atlas tectónico de Costa Rica. –81 págs. Ed. Univ. Costa Rica.
FISHER, D. M., Gardner, T. W., Marshall, J., and Montero, W., 1994: Kinematics associated with the late Cenozoic deformation in Central Costa Rica: Western boundary of the Panama microplate: Geology, v. 22, p. 263-266.
MONTERO, W., 1999: El terremoto del 4 de marzo de 1924 (ms 7,0): ¿Un gran temblor intraplaca relacionado al límite incipiente entre la Placa Caribe y la Microplaca Panamá?.- Rev. Geol. Amér. Central, 22: 25 – 62.
MONTERO, W., DENYER, P., BARQUERO, R., ALVARADO, G., COWAN, H., MACHETTE, M., HALLERM K & DART, RICHARD., 1998: Map an database of Quaternary faults and folds in Costa Rica and its offshore regions.- 63 págs. Reporte preliminar de USGS.